La entrada al Mont Saint-Michel es gratuita y puedes pasar el día contemplando el pueblo y las vistas que lo rodean. Sin embargo, hay muchas cosas que ver y hacer, incluidos museos, iglesias y, por supuesto, la espectacular Abadía situada en lo alto.
La subida al Mont Saint-Michel es considerable: el camino que conduce a la cima es empinado, estrecho y adoquinado. También hay una buena cantidad de escaleras que debes subir, especialmente cuando te aventuras a la Abadía.
Desde la Grande Rue, de camino a la Abadía, no se pierda la iglesia parroquial de Saint-Pierre, rodeada por un cementerio donde se encuentra la tumba de Mère Poulard y una estatua de plata dedicada a Saint-Michel. También está el Museo Marítimo, que ofrece información sobre el entorno de la isla y su ecología.
¿Como navegar?
Una vez en Le-Mont-Saint-Michel, será fácil moverse por el pueblo; asegúrese de llevar el calzado adecuado, ya que hay muchos escalones a lo largo de la isla.
La forma más sencilla de llegar al Mont Saint-Michel desde París es tomar un tren directo a Rennes. Desde allí podrá tomar un autobús directo al Mont Saint Michel. La estación de tren más cercana desde otras direcciones es Pontorson. Un autobús lanzadera directo le llevará desde allí a la isla.
Todos los visitantes, ya sea que lleguen en autobús o en coche, deben caminar (40 minutos) o tomar el autobús gratuito (10 minutos) o un carruaje tirado por caballos durante los últimos 3 km hasta el Mont St Michel.