Turín, capital del Piemonte, se encuentra aparentemente a tiro de piedra de los Alpes, a orillas del río Po. Una vez vista como puramente industrial, aunque próspera, hoy es una ciudad elegante, la tercera más rica de Italia, que combina el estilo y la cultura históricos con las comodidades del siglo XXI. Si penetra en los suburbios, ciertamente sombríos, se encontrará en un elegante centro de la ciudad, rico en parques, bulevares y plazas bordeadas de serenos palacios.
Una de ellas es la Piazza San Carlo, rodeada de arcadas que albergan cafés históricos. La Casa de Saboya francesa pagó por todo esto, transformando la ciudad en el siglo XVII y haciéndola apta para convertirse en la primera capital de Italia en 1861. No se pierda el Museo Egizio, un museo egipcio de clase mundial, o la Galería Sabauda, repleta de pinturas importantes. En otros lugares, disfrute de la Mole Antonelliana, la respuesta de Turín a la Torre Eiffel y ahora un museo cinematográfico, o la antigua fábrica de motores Fiat, transformada por la superestrella de la arquitectura Renzo Piano, en un centro comercial y de exposiciones. Hay muchas otras iglesias, museos y barrios distintos para explorar y fútbol para experimentar: la Juventus y el Torino son equipos locales. Recuerde también que el chocolate y el alcohol son productos locales, Turín es el hogar del Martini.
